El Oro de Mefisto (60 page)

Dietrich, Josef
Sepp

General de las SS y jefe de la Leibstandarte-SS Adolf Hitler, se inició como chófer del Führer, pero su activa participación durante la Noche de los Cuchillos Largos le hizo ascender rápidamente. Tras la guerra, fue condenado a veinticinco años de prisión por ser el máximo responsable de la masacre de Malmedy, en la que fueron ejecutados prisioneros aliados. Tras cumplir diez años, fue puesto en libertad. En 1956 fue nuevamente detenido por las autoridades alemanas por su papel en la Noche de los Cuchillos Largos y condenado a diecinueve meses. Falleció el 21 de abril de 1966, de un ataque cardíaco, a los setenta y tres años. Casi seis mil camaradas acudieron a su entierro.

Dulles, Allen

Tras abandonar la estación de la OSS en Wiesbaden, regresó a Estados Unidos para ejercer como abogado. En agosto de 1951 fue nombrado subdirector de la CIA y el 26 de febrero de 1953, director de la Agencia Central de Inteligencia por el presidente Eisenhower. Debido al fiasco provocado por la operación de Bahía Cochinos, fue obligado a dimitir por el presidente Kennedy el 29 de noviembre de 1961. Falleció el 28 de enero de 1969, víctima de una neumonía. Tenía setenta y un años.

Eichmann, Adolf

Teniente coronel de las SS, al cargo de la sección IVB4, responsable de la ubicación y deportación de los judíos en todo el territorio ocupado. Permaneció en Italia hasta 1950. Gracias al padre Krunoslav Draganovic, consiguió un pasaporte de la Cruz Roja y un visado para Argentina a nombre de Riccardo Klement. El 11 de mayo de 1960 fue capturado en ese país por un comando del Mossad y trasladado a Israel para ser juzgado. Encontrado culpable y condenado a muerte, fue ahorcado en la prisión de Ramla en la medianoche del 31 de mayo de 1962. Tenía cincuenta y seis años.

El oro nazi del lago Toplitz

El lago Toplitz, situado en las montañas de Austria, mide poco más de un kilómetro de largo por unos ciento diez metros de profundidad. En el año 2000 se llevó a cabo una gran operación de búsqueda del famoso oro del Reichsbank, sin resultado positivo. La más célebre de estas búsquedas fue la protagonizada por un joven alemán y buzo inexperto, Adolf Egner, en 1963. Al parecer, varios antiguos miembros de las SS lo enviaron junto con otra persona a extraer algo del lago. Cuando se hizo pública la muerte de Egner en el lago, los agentes de las SS fueron condenados a cinco meses de libertad condicional por homicidio involuntario. ¿Dónde estaba el oro del Reichsbank? Un documento alemán de 1972 hacía mención al oro que se escondió en el lago, asegurando que, tras ser arrojado al fondo, se hizo explotar una gran parte de la pared de roca, que sepultó el preciado tesoro. Otras investigaciones llevadas a cabo entre 1983 y 1987 por el doctor Elans Fricke descubrieron restos de aviones, armas y proyectiles, así como diversas cajas con escritura cirílica, lo que alimentó la leyenda de que los rusos pudieron esconder en el lago los restos de la cámara de ámbar. A finales de 1945 se descubrieron cuatro cadáveres, con disparos en la cabeza, semienterrados en la orilla. Los cuatro portaban uniformes de las SS.

Flick, Friedrich

Magnate del carbón y del acero. Se hizo miembro del partido nazi y sus empresas se beneficiaron del trabajo esclavo. En 1947 fue condenado en Núremberg a siete años de prisión por emplear mano esclava, participar en el saqueo en los países ocupados y por sus estrechas relaciones con las SS. En 1950 fue puesto en libertad por orden de un alto funcionario estadounidense. Logró reunir una de las más importantes colecciones de arte contemporáneo de todo el mundo. Murió en su residencia del lago Constanza, el 20 de julio de 1972, a los ochenta y nueve años.

Funk, Walther

Ministro de Economía y presidente del Reichsbank. Durante los Juicios de Núremberg fue condenado a cadena perpetua, pero en 1457 fue puesto en libertad debido a sus problemas de salud. Falleció el 31 de mayo de 1960, a los setenta años.

Globocnik, Odilo

Teniente general de las SS. Máximo responsable de la liquidación de 1,5 millones de judíos en el gueto de Varsovia y de 15.000 en el gueto de Bialystok, incluidos 1.200 niños, y de la supervisión de la deportación a los campos de exterminio de 95.000 judíos desde Lublin. El 31 de mayo de 1945 fue detenido por los británicos. Se suicidó con cianuro ese mismo día.

Hitler y Eva Braun

Su supuesto suicidio en el búnker de Berlín propició durante mucho tiempo toda clase de leyendas. El espionaje soviético de la época, el NKVD, aseguró que tenían en su poder restos de los cadáveres de Hitler y Eva Braun. Los restos fueron trasladados en cajas especiales a un cuartel militar en Alemania Oriental. En 1955 confirmaron que los restos, un trozo de cráneo y una parte de la mandíbula, pertenecían a Hitler. El hueso parietal de su caja craneal permaneció en el Museo de la Guerra de Moscú hasta septiembre de 2009, cuando el arqueólogo forense Nick Bellantoni anunció tras un análisis de ADN que el fragmento del cráneo pertenecía a una mujer de entre veinte y cuarenta años de edad. Probablemente, eran de Eva Braun. El misterio sobre su muerte aquellos días de mayo de 1945 aún continúa.

Hudal, Alois

De clara ideología nazi, Hudal fue durante treinta años responsable de la influyente congregación austro-germana de Santa Maria dell’Anima en Roma. Apoyó de forma entusiasta la anexión de Austria por parte de Alemania. Después de la guerra se convirtió en uno de los más importantes organizadores de las rutas de escape de criminales de guerra nazis como Adolf Eichmann, Alois Brunner, Franz Stangl, Klaus Barbie o Josef Mengele, entre otros. En 1947, sus actividades saltaron a los principales periódicos y en 1952 fue obligado a dimitir. Pasó sus últimos años en un monasterio en Grottaferrata. Nunca mostró el más mínimo arrepentimiento. Antes de su muerte, reconoció en sus
Diarios romanos
su implicación en la red Odessa, a la que consideraba un acto de caridad. Falleció el 13 de mayo de 1963 en Roma, a la edad de setenta y siete años.

Koch, Erich

Comisario del Reich en Ucrania, controlaba la Gestapo y la policía. Ante el avance del ejército soviético, huyó a través del Báltico hasta a Copenhague. Fue capturado por los británicos en Hamburgo en mayo de 1949, extraditado a Polonia y condenado a muerte el 9 de marzo de 1959. La ejecución nunca se llevó a cabo. Falleció de muerte natural en la prisión de Barczewo, Polonia, el 12 de noviembre de 1986. Tenía noventa años.

Krauch, Carl

Presidente del Consejo de Administración de la IG Farben, profesor honorario de la Universidad de Berlín y miembro activo del Partido Nazi. Entre 1938 y 1945 fue plenipotenciario para las Industrias Químicas del Reich. Tras la guerra fue entregado a las autoridades aliadas para ser juzgado en Núremberg en el llamado Juicio de la IG Farben. Fue sentenciado a seis años de prisión. Falleció el 3 de febrero de 1968, a los ochenta y un años.

Krupp von Bohlen und Halbach, Gustav

Diplomático, magnate y presidente del conglomerado Krupp AG. Aunque se opuso al nazismo, en 1933 los nazis le ayudaron a deshacerse de los sindicatos. Firmó contratos para el rearme de Hitler, manteniendo un gran número de esclavos trabajando en sus industrias. En 1941 sufrió una parálisis y cedió el poder del grupo Krupp a su hijo Alfried en 1943. Aunque fue entregado para su procesamiento en los Juicios de Núremberg, no pudo ser procesado a causa de su estado de salud. Falleció el 16 de enero de 1950.

Krupp von Bohlen und Halbach, Alfried

Director ejecutivo del grupo Krupp AG e hijo de Gustav Krupp. Construyó factorías en los países ocupados usando esclavos de Auschwitz. En 1943 fue ministro de Economía de Guerra. Detenido por los canadienses, fue juzgado como criminal de guerra en Núremberg y encontrado culpable. Fue sentenciado a doce años de prisión. En 1950 fue puesto en libertad junto con Fritz Meer, el químico inventor del Zyklon B, usado en las cámaras de gas. Falleció en Essen el 30 de julio de 1967.

Linge, Heinz

Edecán de Hitler y teniente coronel de las SS. Fue una de las últimas personas que se quedaron en el bunker con Hitler y Eva Braun, durante la batalla de Berlín. Y también una de las que se encargaron de quemar los cadáveres de ambos tras su suicidio. Falleció el 9 de marzo de 1980, a los sesenta y siete años.

Mengele, Josef

Oficial de las SS y médico en el campo de Auschwitz-Birkenau. Durante la guerra realizó experimentos con gemelos. Era conocido como el
Ángel de la Muerte
. Al final de la guerra consiguió huir a través de Austria y del llamado Pasillo Vaticano. Se escondió en Argentina hasta 1959 y posteriormente en Brasil, donde falleció ahogado el 7 de febrero de 1979, a la edad de sesenta y ocho años. Su identidad fue confirmada años después gracias a una prueba de ADN que se realizó a sus restos.

Misch, Rochus

Oficial de las SS, miembro del Begleitkommando Adolf Hitler y el último militar que abandonó el búnker de Hitler el 2 de mayo de 1445. Tras ser herido en la campaña de Polonia en 1939, fue recomendando a la escolta del Führer. Entre 1945 y 1954 permaneció en diferentes prisiones soviéticas. En 1955 regresó a Berlín, junto a su familia. Aún reside en la capital alemana. Tiene noventa y tres años.

Pavelic, Ante

Dictador de la República Independiente de Croacia, un estado pronazi. Tras el fin de la guerra, consiguió huir a través del Pasillo Vaticano y refugiarse en la Argentina de Perón. Para evitar su detención y extradición a Yugoslavia, fue expulsado a España, bajo el régimen de Franco, donde falleció el 28 de diciembre de 1959, a los setenta años.

Pohl, Oswald

Responsable de la dirección general de Economía y Administración de las SS, bajo las órdenes directas del Reichführer Himmler. Tras el fin de la guerra, es detenido el 27 de mayo de 1947, cuando trabajaba en una granja. Es entregado a las autoridades estadounidenses para ser procesado en Núremberg por crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y pertenencia a una organización criminal. Fue condenado a muerte el 3 de noviembre de 1947 y ejecutado en la horca, en la prisión de Lansberg am Lech, el 7 de junio de 1951. Tenía cincuenta y nueve años.

Puhl, Emile

Economista en el partido y experto en operaciones financieras de alto riesgo, fue director y vicepresidente del Reichsbank y el máximo cerebro de las operaciones de lavado de oro nazi en los bancos suizos. Durante el juicio de Núremberg fue condenado por crímenes de guerra y sentenciado a cinco años de prisión. Falleció en 1962, a los setenta y tres años.

Reitsch, Hanna

Al terminar la guerra, fue hecha prisionera. Retenida durante quince meses, se la sometió a intensos interrogatorios y finalmente fue liberada en 1946. En 1959 permaneció varios meses en la India y mantuvo una estrecha amistad con Indira Gandhi y el entonces primer ministro Nehru. En 1962 dirigió la Escuela Nacional de Planeadores de Ghana, donde se convirtió en confidente del presidente Nkrumah. Falleció en Fráncfort el 24 de agosto de 1979, a la edad de sesenta y siete años.

Schnitzler, Georg von

Químico y miembro del consejo de la IG Farben. En 1937 fue nombrado presidente del Comité Comercial y en 1942, líder de la Economía Militar, encargándose de la toma de control de las industrias químicas de los países ocupados. Tras el fin de la guerra, fue detenido y juzgado en Núremberg.

El 30 de julio de 1948 fue condenado a cinco años de prisión, pero le pusieron en libertad un año después. Falleció el 24 de mayo de 1962.

Schröeder, Kurt von

Banquero de Colonia, experto en operaciones financieras internacionales y miembro del Partido Nazi, fue el intermediario entre la ITT y las SS de Himmler. Después de la guerra fue juzgado por un tribunal alemán por crímenes contra la humanidad y condenado a tres meses de prisión. Sus últimos años los pasó como presidente de la Cámara Industrial de la Región del Rin, en Colonia. Falleció el 4 de noviembre de 1966.

Stangl, Franz

Oficial de las SS y comandante de los campos de exterminio de Sobibor y Treblinka, fue responsable de la muerte de cerca de un millón de personas. Después de la guerra, fue capturado en Italia por los estadounidenses y enviado a un Tribunal Militar Internacional para ser juzgado. En 1948 consiguió escapar del campo de prisioneros y recaló en Siria y Brasil gracias a la ayuda del obispo Hudal y de la organización Odessa. Trabajó en la Volkswagen de Sao Paulo hasta que fue descubierto por las autoridades alemanas. Detenido el 28 de febrero de 1967, fue extraditado el 23 de junio de ese mismo año. Fue sentenciado a cadena perpetua el 22 de diciembre de 1970. Falleció de un ataque cardíaco en su celda, el 28 de junio de 1971, a los setenta y tres años. Otras fuentes apuntan a que alguien le ayudó a suicidarse.

Suiza y el oro del Reich

Sin los banqueros suizos, la Segunda Guerra Mundial habría acabado mucho antes y centenares de miles de seres humanos habrían salvado sus vidas. Suiza, sus banqueros, sus industriales y sus industrias abastecieron a Hitler de miles de millones de francos suizos y esto le permitió adquirir un gran número de materias primas de alto valor estratégico y mantener engrasada la maquinaria bélica. Los inmensos beneficios que produjo esta alianza secreta entre los gobiernos de Berna y Berlín ayudaron a aumentar el gran poder financiero de la Confederación Helvética, incluso hasta nuestros días. Banqueros, marchantes de arte, abogados o joyeros, todos ellos de nacionalidad suiza, ocultaron y blanquearon el oro enviado por las SS, que habían robado de otros bancos centrales de países ocupados o arrancado, literalmente, a las víctimas de los campos de exterminio, la mayor parte dientes de oro y anillos de boda. Mientras por un lado Suiza se enriquecía con su alianza con Hitler, los judíos que llegaban refugiados a suelo helvético eran devueltos a Alemania. Entre 1938 y 1945, Alemania envía a Suiza cerca de seis mil millones de dólares (unos sesenta mil millones de dólares de la actualidad). En 1995, gracias a las presiones del presidente Bill Clinton, la banca suiza reconoce que ha
encontrado
varias cuentas de víctimas del Holocausto y ofrece pagar treinta y dos millones de dólares. Finalmente, el 18 de agosto de 1998, Suiza acepta indemnizar a las víctimas con mil doscientos cincuenta millones de dólares, con el fin de evitar el veto estadounidense a las operaciones de los bancos suizos en suelo americano. Se calcula que casi cuatro mil millones de dólares del oro nazi transferido a Suiza durante la guerra no han sido localizados hasta el momento…