Sexo para uno (18 page)

Read Sexo para uno Online

Authors: Betty Dodson

Tags: #Autoayuda, Ensayo, Erótico

BOOK: Sexo para uno
11.68Mb size Format: txt, pdf, ePub

Utilizo toda clase de revistas para mujeres —
Vogue
,
Cosmo
,
Glamour
,
Mademoiselle
,
Bazaar
,
Ladies’,
Home Journal
,
McCalls
, y
Seventeen
. Todos los meses tengo una nueva remesa de amantes.

Lo hago con mujeres de todas las edades —adolescentes de
Seventeen
, jóvenes de
Glamour
y
Mademoiselle
, y de mediana edad de
Redbook
. Escribí a la directora de una de las revistas para contarle lo que hacía y me contestó: «¡Me alegro por ti! Tú disfrutas más que las chicas que compran la revista». No lo había pensado antes, pero en los tiempos que corren es una buena manera de evitar enfermedades venéreas.

Larry S.

Poughkeepsie, NY

Querida Betty:

Has sido tan sincera al compartir tu vida sexual con todos nosotros que he decidido sincerarme yo también. Hace diez años tuve un romance en mí trabajo. Tenía una plaza de garaje alquilada cerca de la oficina. Nuestros respectivos matrimonios eran de lo más gris, y terminamos masturbándonos juntos en el garaje durante cinco años. Ha sido la experiencia sexual más emocionante y satisfactoria que he tenido en sesenta años de vida. C. nunca llevaba bragas, sólo una faja sin parte de abajo. Yo me ponía un condón todas las mañanas que sabia que iba a estar con ella. Casi siempre teníamos un orgasmo a la vez, y tardábamos siete u ocho minutos.

En las pocas ocasiones que tuvimos para follar, yo tardaba mucho y creo que C. no se corrió nunca. Ella siempre decía que prefería lo que hacíamos en el coche. Entonces si que se corría con facilidad y deprisa. Nos contábamos nuestras fantasías sexuales, lo que hacia que la cosa se pusiera mucho más caliente. C. me contó que nunca se corría con su marido, y que siempre terminaba masturbándose mientras él se iba al cuarto de baño a lavarse. Era triste —pero por lo menos nos teníamos el uno al otro. Cuando se fue a vivir a Atlanta, lo pasé bastante mal. Pero no hay nada que dure para siempre. Tuve alguna aventura mas, pero ninguna como ésta.

Paul D.

Peekskill, NY

Querida Betty Dodson:

Todos hemos leído tu libro en el centro donde trabajo. Consideramos que va a contribuir de una forma muy importante a que se reduzcan los casos de malos tratos a niños pequeños. Es muy importante que los hombres y las mujeres aprendan a quererse a sí mismos y, en consecuencia, a sus parejas y sus hijos. Durante los últimos cuatro años, la característica más común de padres o madres que abusaban de sus hijos era una mala imagen de su propia persona.

W.T. E.

Del Mar, CA

Querida Betty:

Después de tus Terapias, quería intentar hacer algunas de las cosas que nos habías sugerido. El problema que tenía era que no tenía intimidad. Cerraba la puerta de mi habitación y les decía a mis cuatro hijos que no entraran sin llamar, pero siempre se olvidaban. Tenía que encontrar una solución, porque sí aprendía a masturbarme iba a ser mucho más feliz. Al final puse un cerrojo en mi puerta y un cartel que decía NO MOLESTAR - ESTOY MEDITANDO. Les expliqué a los niños que quería un poco de tranquilidad, y que no llamaran a la puerta a no ser que se hubieran hecho una herida. ¡Funcionó!

Ruth V.

Scarsdale, NY

Querida Betty:

¡Llevo masturbándome muchos años y he disfrutado de cada uno de los orgasmos! Me parece que la masturbación probablemente es la forma más perfecta de tener sexo. No hay peligro de SIDA ni de ninguna enfermedad venérea. Es imposible quedarse embarazada o dejar embarazada a una mujer. Y no hay que preocuparse del humor del otro. Una mujer me contó que podía masturbarse en cualquier sitio y tener un orgasmo sin que se enterara nadie —en un autobús o en un avión, por ejemplo. Sólo necesitaba mover los músculos apropiados, los
músculos del amor
. (No me acuerdo del nombre científico.)

A mí también me gusta usar un vibrador. Tengo uno con un vaso de goma al final. Cuando estoy solo y tengo ganas, pongo una cinta erótica en el video y enchufo el vibrador. Es una sensación maravillosa mientras veo como se quieren unas personas de lo más atractivas (y a veces se quieren a sí mismos, cosa que me da mucha más
marcha
). Puedo estar así durante una hora o más. Entonces, cuando hay una escena caliente de verdad, ya no puedo dar marcha atrás y tengo un orgasmo profundo. No siempre lo hago solo. De vez en cuando encuentro a una amiga que disfruta viendo como me masturbo a la vez que lo hace ella.

Allan L.

Jacksonville, PL

Querida Betty:

Te quiero contar lo que me pasó en un concurso que hice con una amiga. Fue hace quince años, pero lo recuerdo muy bien. Decidimos competir a ver quién conseguía tener más orgasmos en tres horas, con un vibrador. Ella tuvo diecisiete, y cada uno de ellos fue un espectáculo maravilloso. Cuando más guapas están las mujeres es cuando están teniendo un orgasmo. ¿Y yo? Sólo tuve dos. Intenté llegar hasta tres, pero no pude. ¿Qué quieres que te diga? Sólo que me enteré de cuál era el sexo débil. Me inclino con modestia ante las mujeres — y a lo mejor, mientras lo hago, pueda dar una chupadita o dos, y practicar mi hobby favorito.

Stewart M.

Santa Fe, NM

Betty:

Te mando un giro postal en vez de un cheque porque todavía vivo de mis padres y controlan mí chequera. No quiero que sepan que leo cosas sobre el
pecado prohibido
.

Ya sé que has debido oír historias de todo tipo, pero ahí va una: Una tía mía tuvo que ser ingresada porque tenía una hemorragia uterina. Antes de que supiéramos que era un fibroma, mi madre dijo: «¿Ves lo que pasa cuando uno juega demasiado con su cuerpo?» Yo pregunté: «¿Cómo sabes si jugaba o no?» Contestó: «No lo sé, ¡pero esto es lo que pasa!» P.D. Sólo tiene cuarenta años y estamos en los ochenta, asombroso, ¿no?

Se supone que nos tenemos que castrar (no hay que tener relaciones prematrimoniales, no hay que masturbarse, ni tocar a un tío con el que llevas un año). ¿Pero qué pretenden que hagamos?

Sin embargo, he avanzado mucho. Mi novio y yo nos masturbamos juntos, y muchos de mis amigos también. Cada vez tengo menos remordimientos. Como vivo con mis padres te agradecería que mandaras el libro en un envoltorio normal, ya me entiendes.

Monica P.

Austin, TX

Other books

The Price of Honor by Emilie Rose
Sunlord by Ronan Frost
Sins of a Virgin by Anna Randol
Secret Admirer by Ally Hayes
Untitled by Unknown Author
ShadowsofNight by Erin Simone
Enchanting Pleasures by Eloisa James
Dante's Stolen Wife by Day Leclaire, Day Leclaire
Blood Relative by Thomas, David