El grupo de amigos salieron para otra región del Himalaya y Emil les dijo al salir, los mando al cuidado de dos hombres de mi confianza; Uds. van a tardar cinco días en llegar. Yo no me voy con Uds. porque para mí no es necesario consumir tanto tiempo, pero yo les recibiré a Uds. cuando lleguen allá.
Llegaron al pueblo al quinto día a las 4 de la tarde, y quien los recibió en efecto, fue Emil. Asombrados advirtieron que ellos habían tomado la única ruta entre los dos pueblos. El Correo era el único que podía viajar a menor tiempo, y éstos viajaban de día y de noche y con relevos. Pero he aquí a un señor avanzado en años que no les parecía a ellos posible que emprendiera un viaje y lo cumpliera en menos tiempo que ellos!
Su explicación fue: "Yo quiero que Uds. comprendan que el hombre, en su reino, no conoce límites de tiempo o espacio. Cuando el hombre se conoce a sí mismo, no tiene que chapalear cinco días para atravesar 90 millas.
El puede salvar cualquier distancia instantáneamente. Hace pocos momentos yo estaba en el pueblo que Uds. dejaron atrás. El cuerpo que Uds. vieron aún reposa allá. El compañero de Uds. que quedó allá, les dirá. El está aún contemplando el cuerpo que dejé inactivo. Los dos hombres que envié con Uds. pueden igualmente hacer lo mismo; sólo que los envié de esta forma para atenderlos a Uds. Es para que vean que somos todos humanos como Uds., sólo que hemos desarrollado los poderes que el Padre nos ha dado a todos. No hay otro misterio. Mi cuerpo permanecerá allí hasta esta noche. Luego lo traeré aquí y el amigo de Uds. emprenderá los cinco días de camino para acá.
En la noche, cuando se hallaban reunidos, Emil se apareció sin abrir ninguna puerta y dijo "Me han visto aparecer como por magia. Permítanme decirles que no es magia ninguna". Voy a demostrarles un sencillo experimento que podrán atestiguar. Aquí tenemos un vasito de agua que acaban de traer del manantial. Ven Uds. que en el centro del agua se está formando una partícula de hielo, vean ahora como esa partícula se atrae a sí más hielo, partícula por partícula, hasta que ya toda el agua en el vaso está helada. ¿Qué es lo que ha ocurrido? Que yo sostuve los átomos centrales del agua en el Universal, hasta que se formaron, en otras palabras, bajé sus vibraciones hasta que se volvieron hielo y fueron contagiando las partículas en contorno. Esto lo podría aplicar al agua del vaso, de la bañera, de un lago, del mar y de toda la masa de agua del planeta Tierra, ¿no es así? ¿Y qué ocurriría? Todo se congelaría. ¿Y para qué? ¿Por virtud de qué autoridad? Usando la Ley Perfecta, pero ¿para qué propósito? Para nada. Ningún bien ha sido engendrado. Si yo hubiera continuado, ¿qué cosa hubiera ocurrido? ¡La reacción! La Ley del Bumerang o del Círculo. Yo conozco la Ley, y ésta me hubiera regresado mi expresión. Yo entonces hubiera obedecido mi propio mandato y me hubiera congelado. En cambio, si yo expreso el bien, recojo la cosecha de mi bien para toda la eternidad.
Mi aparición en esta habitación la puedo explicar de la forma siguiente: Allá en el cuarto en que quedó mi cuerpo, yo lo mantuve en el Universal, elevando sus vibraciones hasta que él regresó a lo Universal donde existe toda substancia. Nosotros lo expresamos así:
"Devuelvo mi cuerpo a lo Universal". Luego a través, o por virtud de mi conciencia Crística o mi YO SOY, sostuve mi cuerpo en mi mente hasta que sus vibraciones descendieron y tomó forma aquí en esta habitación y pudieron Uds. verme. No hay misterio. Yo sólo estoy usando el Poder o la Ley que me ha sido dada por el Padre a través del Hijo Amado. ¿Y no es acaso este Hijo: yo, tú y toda la humanidad? ¿Dónde está el misterio? NO HAY MISTERIO ALGUNO.
Considera la FE representada por el grano de mostaza. Nos viene de lo Universal al través del Cristo Interior que ya ha nacido dentro de todos nosotros. Ese grano nos entra por la mente supraconsciente del Cristo, el lugar de receptividad dentro de nosotros. Luego tiene que ser llevado al "MONTE", "MONTAÑA", o sea, lo más alto dentro de nosotros; el punto central sobre la cabeza y sostenido allí. Entonces le permitimos al Espíritu Santo que descienda. Ahora viene la admonestación: "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu fuerza, con toda tu mente". Piensa. ¿Te viene el significado? Este Espíritu Santo viene en diversas formas. Tal vez en entidades minúsculas que tocan pidiendo entrada. Debemos aceptar y permitir a este Santo Espíritu que entre y se una con el puntico de luz o semilla de conocimiento, y que dé vueltas en contorno, adhiriéndose, tal como vistes a las partículas de hielo adhiriéndose a la partícula central y creciendo en forma de círculo, multiplicándose y expresando esa semillita de conocimiento hasta que le podrás decir a la montaña de dificultades "Vete y lánzate al mar" y se hará. Llama a esto la Cuarta Dimensión o lo que quieras. Nosotros lo llamamos Dios en expresión a través del Cristo en nosotros.
Con mi Cristo por guía y viendo la vida bella va siempre mi carreta amarrada a una estrella.
Sin bajarme de plano porque estoy en lo cierto siempre digo segura mi día está cubierto.
No me asusta el mañana ni puedo acongojarme mi Cristo va conmigo ¿ya qué puede asustarme?
Y camino segura con valor y coraje pues no está nunca muerto ni jamás se va de viaje.
Pídele lo que quieras y sin miedo camina su Presencia es sin puerta ni horario de oficina.
Y ya mi paso es firme y nunca vacilante pues por donde yo paso mi Cristo va delante.
Siempre le doy las gracias viendo la vida bella siempre va mi carreta amarrada a una estrella.
No está enfermo mi cuerpo ni mi dicha distante y al despertarme veo mi copa rebosante.
El Amor y la Verdad son ahora mi meta me envuelven dos colores el Rosa y el Violeta.
Así llamamos en metafísica a esas frases claves que parecen contener magia, porque al recordarlas
y pronunciarlas en el momento oportuno se NOS HACE EL MILAGRO.
Estos versos son colaboración espontánea de nuestra querida condiscípula Marina Sánchez.
NUESTRO LEMA:
LO QUE NO PUEDAS ACEPTAR DÉJALO PASAR MAS ADELANTE LO COMPRENDERÁS.
El presente uso de la Astrología, no tiene la menor relación con el uso que tenía hace muchos siglos.
En aquel entonces no contenía ningún dicho negativo de ninguna clase.
El gran daño es que se fija la atención y se aceptan los dichos negativos en una forma mucho mayor de lo que el estudiante quiere admitir o confesar. La fuerza siniestra negativa, generada por la humanidad en el mundo, siempre se aprovecha de cosas así para mantener la atención especialmente de los estudiantes que están adelantando y arrastrarlos hacia abajo en vez de elevarlos.
Cuando hay un horóscopo que indica la muerte de alguien, varias mentes fijan su atención sobre esa idea y se comete un asesinato indirecto pero cierto; tan sutil, que la gente se horrorizaría si alguien les recordara que ellos tuvieron parte en dicho asesinato, (porque contribuyeron al fijar sus mentes en el hecho) pero les aseguro amados estudiantes que a pesar de ese asombro es un hecho verdadero.
Si los estudiantes de Astrología pudieran ver la fuerza destructiva que genera el presente uso de la Astrología, ellos descartarían ese estudio tal como rechazarían a una serpiente venenosa en posición de ataque para poner la muerte en sus venas.
Yo les ruego, amados estudiantes, en el nombre de vuestra luz y progreso, que se mantengan firmes dentro de su Presencia YO SOY y que no permitan que su atención sea mantenida o desviada por ninguna cosa exterior si es que Uds. quieren evitar la rueda del nacimiento y la reencarnación indefinidamente.
Desde el gran amor de mi corazón, como de quien mira y conoce lo que Uds. no pueden conocer aún, los insto a que eviten todo aquello que tenga un sabor negativo de expresión o condición, así Uds. se elevarán en alas de su propia Presencia YO SOY a la liberación infinita y a la bendición de la perfecta, eterna e ilimitada LUZ.
Un filósofo dijo, "La Vida es la adaptación a las circunstancias exteriores", y explicó que toda cosa viviente muestra una tenacidad sorprendente en mantenerse viva, creciendo, y adaptándose a las condiciones en que tiene que vivir.
Esto es verdad en cuanto al reino vegetal y el reino animal. Asombra ver cómo las mariposas, los insectos, los animales poseen coloridos que los confunden con la vegetación del paraje donde viven, suponemos que para defenderse del hombre; y esto nos demuestra que es el instinto atávico; la vida inteligente ella misma, la que emplea todos los medios para conservar a sus pequeñuelos hasta que puedan defenderse ellos mismos.
Pero esto no es correcto con respecto al ser humano, el hombre que ya ha trascendido todas las etapas inconscientes, y ha desarrollado sus poderes latentes.
La Biblia enseña que el hombre no tiene ninguna necesidad de amoldarse a las condiciones en que nace, ni de resignarse a ninguna cosa. Todo lo contrario, la resignación, esa actitud que hasta ahora ha sido llamada una virtud, es en realidad una ofensa contra la inteligencia; es pereza mental y física; y va contra todos los impulsos intuitivos del individuo. Claro está que todo esto es debido a la ignorancia de la raza; y al enterarse el hombre que el impulso de su alma es la voz de Dios en él, ya deja de doblegarse y busca la manera de dominar.
El doblegarse o resignarse implica cobardía o por lo menos la aceptación de que lo exterior posee poderes superiores. Esto lo denomina el Primer Mandamiento "idolatría". No tendrás falsos dioses ante mí.
La Biblia dice que el hombre tiene dominio sobre todas las cosas, y esto hay que tomarlo en serio. No significa, que nos debemos poner en rebeldía abierta, o sea físicamente, por ejemplo, contra una ordenanza oficial que no nos guste, o alguna costumbre social establecida, o contra algún deber moral o familiar porque sí, porque nos da la gana de no seguir cumpliendo, no. Significa que tenemos poderes mentales para transformar lo exterior, y desarrollando nuestra naturaleza espiritual, no podremos jamás actuar en forma arbitraria hacia los demás. Nuestras acciones serían, entonces, siempre en bien de todos, y de nosotros mismos por consiguiente.
Por ser humanos y ya no animales o vegetales, poseemos intuición, raciocinio y sentido común, o sea la Sabiduría Divina; y usando estas facultades, sabremos qué es lo que nos incomoda con respecto a la condición del momento. El segundo paso es "conocer la Verdad", o sea meditar sobre la realidad espiritual que está oculta detrás de la apariencia material, y ya con eso basta para ver transformarse la apariencia, no importa cuál sea. La Ley Espiritual con sus canales infinitos nos sorprende con una solución que jamás se nos hubiera ocurrido.
Este es el proceso que llaman los Maestros, la Oración Científica.
La forma de desarrollar la naturaleza espiritual es practicando la Oración Científica. Logrando, aunque no sea sino una demostración, primero para convencernos de esta verdad, luego para enseñarnos la técnica. Cada vez que obtengas una demostración, sea para tí mismo o para otros, ganas un aumento de comprensión espiritual, y aprendes más Metafísica que en muchas horas de lectura o de escuchar conferencias.
No pierdas tiempo tratando de contestar preguntas teóricas o doctrinales. Cualquier conclusión sobre éstas no será sino otro concepto intelectual más y ya sabes que el intelecto lo materializa todo. Cura a alguien, o compón una situación; haz un tratamiento afirmativo de comprensión divina y a los pocos días te encontrarás comprendiendo perfectamente el asunto teórico o doctrinal que te confundía, en lugar de haber sacado un formalismo intelectual más.
No esperes comprender TODO lo de Dios con sólo unas cuantas semanas de estudio. Es inútil que un estudiante de álgebra, por ejemplo, comprenda el teorema del binomio si todavía no puede comprender una simple ecuación.
Aprende lo siguiente: "SIEMPRE TENEMOS SUFICIENTE COMPRENSIÓN Y SUFICIENTE PODER PARA DOMINAR LO QUE SEA QUE ENTRE EN NUESTRAS VIDAS". La Vida cuida a sus pequeñuelos. Ella no manda nada que esté por encima de nuestras fuerzas o más allá de nuestros poderes. Siempre, siempre hay que usar la Verdad que conocemos.
A los principiantes y a veces hasta a los estudiantes que no están principiando, les ocurre que porque no ven la demostración rápidamente, llaman al maestro y le dicen "Hazme un tratamiento". Si el maestro o la maestra es digna del título contestará; te ayudaré mentalmente, pero no puedo hacerlo por ti. Permitir que el discípulo haga esto equivale a impedir que un niño aprenda a caminar para que no se caiga.
Hay la costumbre de repetir frases estereotipadas como ésta: Es que así es la humanidad; y lo peor es que no cambia! El Maestro Emmet Fox dice: "La humanidad es tal que con sólo voltear su pensamiento a Dios y creer en su Amor y su Protección, puede rehacer su cuerpo, su vida, sus circunstancias, llenar su corazón de paz y rodearse de dicha y de armonía. La humanidad es tal, que cuando el temor, la tentación, la ira y la tristeza la ataca, puede borrarlas y sustituirlas por la confianza y la felicidad, con sólo pensar correctamente. Entonces, ¿dónde está la necesidad de cambiar a la humanidad? Si tiene la clave de la armonía y de la infinita perfección, ¿qué más puede desear? ¡Únicamente aprender la Verdad! Pues eso es la vida, una escuela y eso ya lo tiene. La escuela más completa de todas. En ella aprendemos todo lo concerniente a la materia y a cómo vivir en las condiciones materiales. Cuando pasamos al próximo plantel, el Astral, aprendemos a vivir en condiciones inmateriales o descarnadas.
Alegrémonos, porque nosotros estamos ya en la clase donde se aplican aquí las lecciones aprendidas allá.
Este caso tiene como sesenta testigos y se ha difundido muchísimo en Caracas.
Una de nuestras Maestras de Metafísica, que la llamaremos por su Hombrecito de cariño, Talita, estaba asistiendo a unas clases de cocina en la gran tienda por Departamentos "VAM" de Caracas.
Una tarde de clases, llegó la Maestra que dictaba el curso de cocina, contrariada porque se le habían olvidado las llaves del gabinete en que se guardaban los implementos que se usaban en la clase.
La Maestra hizo venir a un operario del Almacén para que forzara el gabinete. El operario trabajó mucho, hizo varios intentos, pero el gabinete permaneció trancado e impertérrito.